En la historia de la música y literatura, del arte y del humor, de la cultura en general, hay muchas referencias al vino, a los estados que el vino genera o que ocurren en torno al vino. Y el viernes, creemos, es el sinónimo más exacto de tres días que unirán encuentros, risas, lágrimas (de alegría o tristeza), brindis, confesiones y muchas sucederán con un vino de por medio (o varios, esperemos!)
En honor a los próximos días, cada viernes trataremos de hablar de la cultura y el vino, con un poema, una canción, una escultura y su historia. Hoy comenzamos por....
Norah Jones es una cantante originalmente del new jazz pero que, con el correr de su carrera incorporó soul, pop y country. Nació en New York el 30 de marzo de 1979, ganó 9 premios Grammys. Si bien es cantautora de la mayoría de sus canciones, ésta que elegimos la escribió en 1999 Jesse Harris quien la grabó y vendió a través de su sitio online. Un año después Jesse se sumó a la banda de Norah Jones y le ofreció la canción. Con unos arreglos introducidos, Norah lo grabó pero pensó en la canción como un simple demo, nada que implicaría mucho en su carrera pero, en realidad, lo fue todo porque así consiguió su primer contrato con Blue Note Records y la hizo ganar uno de sus primeros premios Grammys en el 2003, incluyendo Mejor canción del año, y subió al escenario para interpretarla durante la ceremonia.
¿Y porqué la elegimos? No solo porque tiene buena estrella y creemos que nos va a dar suerte, sino porque habla de algo que pasa con el vino:
My heart is drenched in wine
Mi corazón está empapado de vino
But you’ll be on my mind
Pero vos estarás en mi mente
Forever
Para siempre
Y esto nos hizo acordar que por más que quieras ahogar tus penas en alcohol, acordate que son de corcho y flotan.
Salud y buen finde!!
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